lunes, 9 de marzo de 2015

-IR DE SHOPPING-
Cuando tienes veinte y cuando tienes treintaypico


1. Cuando tienes 20, te vuelves loca comprando un montón de piezas de 9,95 E. Puedes tener la misma camiseta de tirantes en 6 colores diferentes y te encanta que el armario no te cierre. Con treintaypico, prefieres comprarte pocas pero que sean de calidad. Observas el tejido, la textura, incluso te fijas en la odiosa etiqueta de lavado, te preguntas si realmente te lo pondrás o lo sabrás combinar bien...



2. Con veinte, quedas los viernes por la tarde con tus amigas y soléis hacer la ronda por las mismas tiendas. Acabas comiéndote algún helado con topping de chocolate y avellanas mientras planeas qué película verás el sábado por la tarde en el cine. Con treinta, te escapas sola y mejor entre semana para ir directa al grano.





3. Con veinte, tienes el segundo cajón lleno de tops negros y con brilli brilli para salir los viernes por la noche. Con treintaypico, los accesorios se convierten en tu mejor aliado y pueden transformar un look de día en un look perfecto para ir a tomar un gin-tonic un viernes noche.





4. Cuando la dependienta te dice que ya no queda de tu talla y que sólo hay lo que ves en ese mostrador. Cuando tienes veinte:


Cuando tienes treintaypico:




5. Cuando te acompaña tu madre de shopping, con veinte te compras todo aquello que ella te dice que es feo y que no te favorece. Con treintaypico, empiezas a tener en cuenta sus consejos.





6. Cuando sales a comprar zapatos, con veinte eres capaz de comprarte hasta una talla (o talla y media) menos si no queda de tu número. Te entra una especie de bloqueo mental y te intentas auto convencer con el "ya se darán de si" o "es que es el zapato perfecto y no voy a encontrar otro que combine mejor". Con treintaypico, lo analizas más detenidamente y piensas en la carnicería del día después.





7. Ante las colas infinitas que se forman en algunas cajas, con veinte no eres muy consciente de que forman parte del ritual de shopping un sábado por la tarde y sueles tomártelas con mucha filosofía. Con treintaypico es una de las primeras cosas en las que te fijas nada más cruzar la puerta de la tienda. Y es entonces cuando en menos de un minuto analizas y sopesas si valdrá la pena hacer la cola o no. 




8. Cuando entras a los probadores, con veinte es uno de los momentos más divertidos y excitantes de la tarde de shopping. Con treintaypico te molesta todo, absolutamente todo: la típica cortina que no tapa nada, las 13 perchas que se han ido dejando olvidadas, las bolas de polvo que ruedan por el suelo a lo Far West, los olores corporales de las adolescentes, los espejos que engañan y la pereza de desvestirte para probarte unos pantalones que estás un 75% segura de que no te quedarán bien.








9. Con veinte, cuando una amiga te pide consejo en el probador le dices lo que quiere oír. Con treintaypico, le dices lo que piensas realmente.





10. Cuando tienes veinte y sales de rebajas todo te parece bien. Con treintaypico sueles ir el primer o el segundo día a por aquella prenda que fichaste en temporada y cuando la encuentras rebajada y encima de tu talla la sensación de euforia es indescriptibleee!


3 comentarios:

  1. Muy de acuerdo con todo aunque yo a partir de los 25 ya tenía algunas actitudes de treintaypico... Besos bella!

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  2. jajjajja buenísimo el post y llevas razón.. ha sido estar leyéndolo y asintiendo todo el rato.. aquí una de treintaypico. un beso!
    ANGYCLOSET

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  3. jajaja buenísimo!! otra de treintaypico ;)

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